viernes, 20 de marzo de 2015

En mi búsqueda de alternativas a las escuelas infantiles convencionales para mi propio hijo empiezo a informarme y formarme en pedagogía Waldorf, Montessori y a estudiar a Emmi Pikler,  descubrí la   figura de Madre de Día y me pareció lo más idóneo para los primeros años en la vida de un niño. Una Madre de día es una alternativa a las guarderías o escuelas Infantiles. Es una persona cualificada o con experiencia, especializada en la primera infancia que ofrece en su propia casa un ambiente hogareño y de cariño donde acompañar a un grupo reducido de tres o cuatro niños. La madre de día respeta y atiende a cada niño de manera individual. La extensión del hogar con un solo cuidador y en un entorno tranquilo de pocos niños, permitiendo un cuidado y una atención individualizada, sin prisas, dándoles el tiempo que necesitan en su desarrollo, en definitiva: una vuelta a la crianza en el hogar.
Inicio mi proyecto de madre de día con mucha ilusión. Abro mi hogar ofreciendo a los pequeños de entre 0 y 3 años un ambiente seguro y confortable, un segundo hogar, a fin de cuentas, en el que poder ir creciendo a su propio ritmo. Mi iniciativa pretende ser un espacio de crianza respetuosa, acompañando a los niños de una forma presente, cálida, cercana y disponible en cada momento, cuidando sus necesidades, acompañando sus emociones. Quiero que se sientan en su hogar para que sea el marco de descubrimiento y desarrollo ideal que ellos necesitan y tener una cercanía y unión con las familias en esta aventura mágica de acompañar a sus hijos.